LA VIOLENCIA NO TIENE GÉNERO
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12 diciembre, 2019El conjunto blanquiazul empató durante la noche de ayer ante el Silla CF en uno de los encuentros más surrealistas que ha disputado el conjunto blanquiazul en mucho tiempo. El partido tuvo que suspenderse alrededor de media hora para atender a un jugador local que permaneció inmóvil en el centro del campo hasta que llegaron las asistencias médicas para trasladarlo a un centro sanitario, ya que en ese instante no se encontraban en el terreno de juego.
El equipo de Vicente Parras se presentó en casa del colista con muchos cambios en el once, unos por obligación como los del sancionado Raúl González o los del lesionado Rubén Garcés, otros por precaución, caso de Ruba y Juli que venían arrastrando problemas físicos, y otros por decisión técnica, que dejaron a Jony Ñíguez y Jorge Moltó en el banquillo.
El Silla CF planteó un partido de salida con el claro propósito de dejar jugar lo menos posible al CD Alcoyano a base de muchas interrupciones, con constantes faltas que hicieron que los blanquiazules en ningún momento se sintieran cómodos. Para terminar de enredar todavía más las cosas, en el minuto 42 el colegiado decidió suspender momentáneamente el encuentro después que en una pugna por un balón en el centro del campo entre Migue Aracil y Márquez, el jugador local cayera en mala posición y ante la falta de efectivos de la Cruz Roja, se decidió no tocar al futbolista hasta la llegada del personal sanitario para su traslado al hospital.
El partido pudo reanudarse justo media hora después en el cual se terminó jugando los catorce minutos restantes sin que sucediera nada, finalizando así una primera parte totalmente surrealista por todo lo acontecido alrededor de esta lesión que luego no fue tan grave como en un principio se pensaba. La segunda parte comenzó con susto para el CD Alcoyano, puesto que el jugador local Verdú estrelló un balón en el poste tras un disparo desde la frontal, pero el juego no mejoró con respecto a la primera mitad, con un Deportivo fuera del partido con tanta interrupción y juego subterráneo de los locales.
Hubieron dos minutos en los que el CD Alcoyano pudo deshacer la igualada, primero en una acción de Pablo Carbonell en el minuto 70 pero el disparo del jugador blanquiazul lo repelió el portero Lucas, mientras que dos minutos después el colegiado, culminando una noche bastante desafortunada, anuló un gol de Acevedo por fuera de juego. Al final, empate sin goles entre dos equipos que terminaron dando por bueno el resultado después de casi tres horas de partido en las que hubo de todo menos fútbol.