Ya han acabado las obras de la última fase del grupo de viviendas Sant Jordi. Estas actuaciones han supuesto la mejora de un total de 20 viviendas situadas en la calle Entenza 3 y 5, y Espronceda número 3 de Alcoy. La primera fase consistió en la rehabilitación del interior de las viviendas y en la segunda fase se ha actuado en las fachadas, cubiertas y elementos exteriores.
La actuación de esta primera fase solucionó las humedades en los entresuelos, el estado de las cubiertas e instalaciones interiores y consolidó el pavimento de las plantas bajas. También se actuó en los patios de los tres inmuebles objete de la obra.
María Baca, concejala de Vivienda destaca la finalización del proyecto pendiente desde 2011: «Una vez más, este Gobierno ha dado solución a un problema heredado del Partido Popular, un problema que afectaba además a 20 familias de nuestra ciudad en uno de los bienes más necesarios para cualquier persona, su vivienda».
«Quiero dar las gracias a los propietarios por la paciencia que han tenido con tantos años de espera y que finalmente han visto finalizada una actuación muchos años después de su anuncio», ha afirmado la concejala de Vivienda.
Las obras en el interior de las viviendas se acababan a principios del año 2019, mejorando el plazo de ejecución previsto en cuatro meses, y los vecinos pudieron recibir las claves de sus viviendas en el mes de Marzo del pasado año, ocupando los pisos aunque quedaba pendiente la segunda parte de las obras que afectaban la parte exterior del edificio.
La segunda fase salió sale con un precio de licitación de 131.340,21 euros y fue adjudicada por 130.995 a Cantó Obras S.L.U. Las obras han consistido en la rehabilitación de las cubiertas y fachadas y ha dado una solución definitiva a una obra que tendrá un coste total, financiado por la Generalitat Valenciana, de más de 500.000 euros.
Hay que recordar que la Generalitat empezó la rehabilitación en 2011 pero, un año después, la empresa que las estaba ejecutando las paralizó porque no había cobrado en todo el año, lo cual supuso que el proyecto no se materializara íntegramente.
Con la llegada de un nuevo Gobierno en la Generalitat en 2015, se retomaron las negociaciones entre el Ayuntamiento y la Generalitat para dar una solución a los propietarios de estas viviendas. Ambas partes firmaban un convenio en Julio de 2018 y en otoño se iniciaron las obras de la primera fase con un coste de adjudicación de 354.058, 57 euros. Al coste de las obras hay que añadir el de redacción del proyecto de las dos fases que fue de 41.019 euros.