RAQUEL JORDA DEL ONSEN PRIMERA MUJER EN LA PENYA MIGJORN
20 noviembre, 2013NUEVOS ROBOS EN ALCOY
21 noviembre, 2013ARTICULO DE OPINION DE JORDI SEDANO
Querido Juan, y digo lo de «querido Juan» ¡no de coña¡ sino porque sigo pensando que en tu artículo contra mí no hay maldad, error, o sentimiento de culpabilidad reprimido, sino un mero cumplimiento de ataque por «acatamiento de ordenes». Y lo entiendo, estando a las órdenes de quien estás. Y digo lo de «querido Juan», porque yo te sigo apreciando mucho. No lo puedo evitar Juan. Te he querido mucho durante mucho tiempo, has sido uno de mis hombres de confianza, absoluta confianza y siempre creí que tú deberías saber como soy y como siento, pero quizá me equivoqué contigo. Qué le vamos a hacer, ¡así es la vida¡. Yo siempre te esperaré. Siempre.
No sufras Juan ni te sientas turbado por mis declaraciones ¡Dios me libre Juan¡ Tengo muchos defectos, tú lo sabes, muchos, pero el ansia de poder y pasar por encima de los demás no han estado ni estarán jamás en mi escala de des-valores y tú también sabes eso, o lo deberías saber mejor que nadie. Te explico rápidamente ese error lógico en la interpretación de una de mis respuestas en la entrevista a la que haces alusión. Te lo explico y estoy seguro que lo entenderás.
En primer lugar, querido Juan, el periodista que me hizo la entrevista es un pedazo de periodista y un gran profesional con el que conversar siempre ha sido para mí, en las pocas ocasiones que he tenido la oportunidad de hablar con él, un lujo. Creo que es, como yo, un alcoyano «pegajosamente enamorado de su ciudad» (le leo asiduamente), es decir, compartimos defectos. Siempre he sentido una cierta simpatía por él y eso hace que, más que una entrevista, aquello fuese para mí una grata tertulia con té incluido.
Cuando alguien está hablando más de una hora y el periodista tomando notas en un bloc «a destajo» (sabes que soy hablador), pues ocurre que se dicen muchas cosas y el que recoge la información a veces no puede interpretar todo al pie de la letra. Pero Juan para que no sufras por mí, desfacer entuertos y evitar que te rasgues las vestiduras, te diré que estés tranquilo, que recobres la calma, y sosiegues tu espíritu, que yo aclaro tus existenciales dudas políticas en un santiamén.
Primero: no me gustan los lobos ¡he conocido tantos…¡. Tú no lo eres.
Segundo: nunca he ido de cordero por la vida (me irritan los medias tintas, los pelotas, y los desleales) recuerda que me enfrenté a Camps por principios y por lealtad. Tu estabas a mi lado entonces. ¡qué tiempos tan difíciles¡
Tercero: Solo ha habido una cosa que me ha importado en la política: Alcoy y los alcoyanos. Habré acertado y habré cometido errores, seguro, muchos errores, pero esa ha sido mi única prioridad, Alcoy y los alcoyanos. El sillón siempre me atrajo muy poco, por no decir nada, y sigo igual o peor.
Cuarto: siempre he sido leal con mis amigos. Nunca entendí la vida sin la amistad y la lealtad. Sin amistad y sin lealtad no se puede vivir. Sin lealtad y sin amistad no se vive, «se sobrevive», pero eso no es vivir sino «morir a plazos».(esta lección, no temas Juan, te la enseñará la vida poco a poco, todo a su tiempo). Y yo, creemé, todavía sigo pensando que tú tienes buen fondo.
Quinto: los «lobos/as con piel de cordero no son «un mito» Juan, son reales, existen en la vida real, y en la política, a veces se multiplican por «tres». No te impacientes, lo comprobarás. Mi tesis sobre esto no es filosófica sino sólida y basada en el más absoluto empirismo puro y duro. Si, Juan, sí.
Como te veo muy preocupado por la frase que hace mención a mi afiliación, pues te diré que esa no fue la intención de mi mensaje en la entrevista, sino justamente lo contrario, me explico: es verdad que yo nunca he sido de derechas, tú bien sabes que yo siempre lo he dicho claro y en público, porque esa es la verdad, pero me afilié porque siempre he creído en un P.P más centrado y porque fue absolutamente necesario para poder presidir el PP en Alcoy, tarea que tuve que asumir cuando Miguel Peralta fue nombrado Secretario General del P.P. en la provincia y tuvo que dejar la presidencia local, y te aseguro que fue con un consenso general importante. Estoy por decirte que estaban todos de acuerdo en que yo debía ser, casi por imperativo legal, el presidente del P.P. en ese momento de cambio, todos menos mi mujer, a la que nunca le gustaron ni la política, ni los cargos, ni los políticos (nos viene de familia).
Juan a mí me tocó desempeñar ese difícil papel durante una década y asumí con mucho orgullo la confianza que se depositó, inmerecidamente, en mí. Asumí un gran compromiso y siempre me he sentido muy orgulloso de mi partido. Pero nunca he sido de derechas. ¡Qué le vamos a hacer Juan¡ Fidelidad a mi partido, eso sí, toda. De hecho Juan yo fui uno de los fichajes personales de Miguel Peralta, evidentemente, con la clara intención de centrar la imagen del partido con gente nueva e independiente. Juan, pero ¿es qué no te has enterado todavía que Miguel Peralta es una de las mejores cabezas políticas de Alcoy y que siempre ha ido tres pueblos por delante de los demás?. Por eso le ha pasado también lo que le ha pasado.¡así es la vida¡.
Querido Juan en esa hora y pico de la entrevista se me hicieron muchas preguntas, tantas que, por extensa, es obvio que el periodista, con buen criterio, ha omitido algunas, porque en lugar de una entrevista hubiera sido una enciclopedia, pero, no obstante quiero hacer mención a algo que dije en varias ocasiones durante la entrevista y que jamás me cansaré de repetir y es subrayar la grandeza de cientos de afiliados que, sin esperar nada a cambio, han estado dándome su apoyo, su cariño y su cercanía personal durante estos años tan difíciles como apasionantes para mí y mi partido. Este es uno de los mejores regalos que me ha hecho la política, el cariño de los afiliados y simpatizantes del P.P. Yo les he respetado, servido y querido con toda mi alma y nunca podré devolverles lo mucho que ellos hecho por mí. Nunca.
Gracias, de todo corazón. Gracias a quienes, en tiempos muy difíciles, defendieron con orgullo y tesón este partido, gracias a ellos se han llegado a alcanzar grandes metas para Alcoy. Gracias a los que pusieron los sólidos cimientos. Gracias a la gente comprometida y con principios que ha arrimado siempre el hombro en la defensa de sus ideales desde los inicios de la democracia. Gracias a Mari Carmen Mira, Lola Alba, Carmina Nacher, gracias a Paco Couñago, Carmina Blanco, Paco Gordejuela, gracias a mi apreciado «jovenzuelo» Paco Alacaraz en el que incluyo a todos y cada uno de los militantes del P.P. Vosotros lo intentasteis, y yo os aseguro que también. Hemos tenido encuentros y también desencuentros durante estos años, pero ellos y todos los militantes y simpatizantes del P.P. conformáis la historia valiente, la esencia y las raíces de este gran partido al que he servido y querido como pocos.
Querido Juan puedes atacarme por voluntad propia o por encargo (como creo que es el caso) tú mismo. Mis espaldas están curtidas a fuego lento. Juan, haz lo que tengas que hacer, pero nunca pierdas la dignidad. Juan, nunca…
Ante tus incomprensibles dudas sobre la interpretación de mis declaraciones y ante el evidente nerviosismo que impera en las filas de tu grupo municipal, permíteme que pueda gritar alto y claro, para que se enteren algunos por penúltima vez: «Viva los afiliados y simpatizantes del PP de Alcoy». Gracias a todos. Siempre estaréis en mi corazón, os debo agradecimiento eterno. Os quiero a los que permanecéis en este gran partido y a los que ya no militáis en él, también. Un fuerte abrazo a todos.
Querido Juan, sólo espero y deseo, de todo corazón, que no te utilicen. Que no te hagan daño jamás. Querido Juan, al margen de la política, que es siempre efímera, y pasajera estoy convencido que, en tu interior (allí donde no hay pieles, lobos, ni corderos), intuyes que, si algún día me necesitas sabes, perfectamente, que allí estaré yo, a tu lado. Cuídate mucho Juan. La «peña» es complicada. Y tú, estoy convencido, empiezas a intuirlo… los lobos acechan.
P.D. Guarda esta carta en un cajón y dentro de unos años reiremos y tomaremos unas birras juntos. Mario Santacreu y yo pagamos, amigo.
JORGE SEDANO SEDANO
CONCEJAL NO ADSCRITO

