LA LLUVIA ROMPE LA QUIETUD DE LA PROCESIÓN DEL SILENCIO EN ALCOY

La lluvia irrumpió minutos antes de empezar la Procesión del Silencio en Alcoy. Pese a ello, más de 60 costaleros y costaleras portaron a hombros los pasos del Cristo Agonizante y la Virgen de la Soledad desde la parroquia de San Vicente y San Antonio, en la Zona Alta de la ciudad, hasta la Font Redona, donde la Cofradía del Cristo Agonizante, encargada de la organización, decidió volver por Sant Nicolauet y no continuar por el itinerario habitual, dada la intensidad con la que llovía.

El agua y la modificación en el recorrido no impidió que numeroso público saliera a la calle para presenciar un acto en el que la música interpretada por el Grup de Dolçaines i Tabals La Cordeta y la Agrupación Musical Serpis, así como las saetas, rompieron la quietud.

Tal y como es habitual, la imagen de la Virgen de la Soledad abrió la comitiva, seguida por La Cordeta, un grupo de legionarios, el paso del Cristo Agonizante y la Agrupación Musical Serpis. Varios miembros de la corporación municipal, entre ellos el alcalde, Antonio Francés, y los concejales Alberto Belda, Jordi Martínez y Lorena Zamorano, cerraron la procesión.